En un nuevo acto de piratería fluvial, la tripulación de la embarcación Eduardo VIII fue asaltada en medio del río Amazonas, en un incidente que resalta la creciente inseguridad en esta importante vía fluvial. El asalto ocurrió mientras la tripulación realizaba maniobras de medición de la profundidad del río para facilitar el tránsito seguro de la embarcación principal.
El ataque se produjo en la isla de Panguana, frente a la comunidad de Gallito, a una hora y media de la ciudad de Iquitos. Juan Bautista Pizango, patrón de la embarcación, relató que en el momento del incidente, estaban a bordo de un deslizador cuando un bote peque-peque, con cuatro ocupantes, los interceptó de manera sorpresiva. Los asaltantes, armados con pistolas, amenazaron a la tripulación, exigiendo la entrega de sus pertenencias. Finalmente, lograron robar un motor fuera de borda valorado en más de 8 mil soles antes de huir rápidamente del lugar.
Este tipo de robos no es un hecho aislado, según los testimonios de los involucrados. Incidentes similares han ocurrido con frecuencia en este tramo del Amazonas, lo que ha generado una creciente preocupación entre los navegantes y habitantes de la región. Ante esta situación, los afectados han solicitado a la Capitanía de Puertos un incremento en el patrullaje y la vigilancia en la principal cuenca loretana, con el fin de prevenir futuros asaltos y garantizar la seguridad en el río.
El incidente resalta la necesidad urgente de medidas de seguridad más estrictas para proteger a quienes dependen del río Amazonas para su subsistencia y transporte, en una zona que es vital para la conectividad y la economía de la región.