José Chihuala ha sido sentenciado a cadena perpetua por el delito de violación sexual en agravio de un niño de 12 años. Así lo dispuso el Poder Judicial, acogiendo la acusación presentada por el Ministerio Público.
El fiscal adjunto provincial Adrián Flores, de la Cuarta Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Maynas, logró probar que, en setiembre de 2012, Chihuala drogó a su víctima con una gaseosa para luego abusar sexualmente de él cuando se encontraba inconsciente.
Gracias a la contundencia de las pruebas presentadas, el Poder Judicial ha impuesto la máxima pena, garantizando que este sujeto no pueda volver a cometer un crimen de tal magnitud.