El hangar de buses de la Universidad Nacional de la Amazonía Peruana (UNAP) cerró sus puertas debido a una protesta liderada por trabajadores de servicios generales de la institución. Vigilancia, limpieza, mantenimiento mecánico y carpintería son algunas de las áreas cuyos empleados exigen que las bases laborales se ajusten a sus realidades y que se actualice el manual de cargos, para garantizar un trato justo y acorde con sus habilidades y experiencia. Durante la protesta, los trabajadores lograron entablar un diálogo con el rector de la UNAP, Rodil Tello, buscando llegar a un acuerdo.
“Publicaron unas bases para un concurso público en la UNAP, pero los perfiles no se ajustan a las necesidades reales de la institución. Exigen licencias AII-B, certificados técnicos titulados para vigilantes, y muchas personas solo tienen secundaria completa. Llevan años trabajando aquí y ahora ven sus empleos en peligro, sienten que es un maltrato. Por eso decidieron tomar la sede e impedir la salida de los buses. Piden que las bases se ajusten al manual de cargos”, explicó Dorita Navarro, jefa de servicios generales de la UNAP.
La manifestación resalta la necesidad de revisar las condiciones laborales y de mejorar la estructura de contratación, para asegurar que los trabajadores puedan mantener sus puestos de trabajo sin requisitos que no se ajusten a sus competencias y trayectoria.