Un presunto caso de abuso policial se denunció el pasado fin de semana en la comisaría de Belén, luego de la intervención de Oliver Pérez Alván, quien fue detenido entre las calles Prospero y Gálvez, y llevado a dicha comisaría.
“Mi hermano estaba ebrio, no lo niego, pero es imposible que haya terminado así. Estaba sano antes de la intervención, y ahora está postrado en el hospital regional. Según el médico, mi hermano sufrió la rotura de las vías urinarias por la paliza que recibió. Pido al general de la policía que tome cartas en el asunto y que esto no quede impune”, manifestó Jack Pérez, hermano del afectado.
La familia exige justicia y que se investigue este presunto abuso de autoridad.