Gracias a los perros que viven en la calle Las Lomas en el asentamiento humano Monte Sion, en el kilómetro 3 de la carretera interprovincial Iquitos-Nauta, los vecinos escucharon los ladridos de estos canes y se dieron cuenta de que un sujeto estaba usando una banca para intentar ingresar a la vivienda de un policía.
Los vecinos salieron a investigar la causa de los ladridos y se encontraron con el sujeto trepando la pared para ingresar. Rápidamente, lo agarraron, le propinaron algunos golpes y lo amarraron a un poste hasta la llegada de la policía.
Los moradores indican que hay un puesto de intervención rápida en la salida de este lugar, pero que no presta servicio cuando ellos lo llaman. Por esa razón, exigen mayor seguridad y advierten a los ladrones que, si vuelven a poner un pie en ese lugar, los van a quemar.